Vida. Montaña rusa. Altibajos. Hoy estamos en la cumbre de la montaña, sientiéndonos los reyes del mundo. Y mañana no sabemos dónde estaremos, pues a veces un segundo puede cambiarlo todo. Etapas, escalones, obstáculos, tropiezos. Nos topamos con miles de personas en el camino, pero sólo unos pocos pasan a formar parte de nuestro ser.
La verdad es que no encuentro el por qué de estas palabras. Seguramente me servirán para expresar que ha terminado una etapa en mi vida, he llegado a un punto de inflexión. A partir de ahora se abre un nuevo camino, nuevos obstáculos, nuevas etapas. No tengo miedo a equivocarme, porque sé que si lo hago rectificaré. Equivocarse y rectificar forma parte de nuestras vidas, pues no siempre vamos a elegir el camino correcto y el más fácil.
Hay que jugar para ganar o perder, y también hay que saber que nunca se fracasa del todo. Sabiendo fracasar se sabe ganar.
lunes, 28 de mayo de 2012
miércoles, 2 de mayo de 2012
Hasta aquí llegó el ritual de enfados y canibalismo estúpido. Son
demasiadas horas en vela y nada que decir. Descansamos nuestra espalda
en las persianas bien cerradas, tú y yo anémicos, y a cada parpadeo
calmado intentamos dormir. Terapias mal llevadas sin nadie que mediara por dos histéricos, mis gritos envasados al vacío reventaron al fin. Y ahora congelo cada instante sabiendo de antemano que son los últimos. La noche en que el noventa y nueve llegó hasta abril.
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